¿Quién fundó a los yihadistas: los Bush, los Clinton u Obama?: Operación Ciclón de la CIA
24.08.2016
La
perturbadora imputación de Donald Trump de que Obama es el "fundador"
de los yihadistas de Isis/Daesh ha causado tremendo revuelo tanto en
Estados Unidos (EU) como en el resto del mundo (http://goo.gl/7yFf7p).
Ya Trump había acusado sin rubor a Obama y a su
entonces secretaria de Estado, Hillary, de estar detrás de la
proliferación yihadista (http://goo.gl/ggJvEn).
El mismo presidente ruso, Vlady Putin, había indiciado a EU de encontrarse detrás del irredentismo yihadista (http://goo.gl/I1kn6D).
Debido a la conmoción, el mismo Trump se desdijo
para comentar que sus declaraciones eran producto del "sarcasmo", para
volver a la carga un día después y reiterar sus graves cuan temerarias
imputaciones que sus seguidores, que conforman un mínimo de 40 por
ciento del electorado, creen a pie juntillas (http://goo.gl/DgmSLv).
Pero, ¿quién realmente fundó a los yihadistas?
La clave primigenia se encuentra en la Operación Ciclón
de la CIA, cuando el 3 de julio de 1979 el presidente Carter autorizó
en forma "secreta" 500 millones de dólares para crear, a instancias de
Zbigniew Brzezinski, su asesor de Seguridad Nacional, un movimiento de
guerrilleros islámicos en Afganistán/Pakistán con el fin de
desestabilizar y empantanar a la URSS.
La CIA fue encargada de la Operación Ciclón,
que financió y armó a los guerrilleros de la Yihad, los legendarios
mujahidines de 1979: antecesores de sus hijos y nietos yihadistas hasta
2016 (http://goo.gl/g7nggB).
Brzezinski confesó a la revista francesa Le Nouvel Observateur que el objetivo de Operación Ciclón era “inducir a una intervención militar soviética (http://goo.gl/6gtg0l)”:
el "día que los soviéticos oficialmente cruzaron la frontera [de
Afganistán] le escribí al presidente Carter: ahora tenemos la
oportunidad de propinarle a la URSS su guerra de Vietnam".
La URSS había intervenido para apoyar al régimen
filomarxista de la República Democrática de Afganistán y, desde el
vecino Pakistán, el general Muhammad Zia-ul-Haq coordinó, con la
bendición de la CIA, a los mujahidines durante la década de los 80.
A propósito, Zia-ul-Haq, quien mandó ejecutar al
premier Zulfikar Alí Bhutto después de haberlo depuesto en un golpe
militar, murió en un extraño atentado aéreo y se llevó todos sus
secretos al paraíso. ¿Para borrar rastros y rostros?
El financiamiento de Operación Ciclón por
la CIA es considerado el más costoso y de mayor duración por EU:
continuó 10 años después de su arranque durante la guerra civil en
Afganistán de cuatro años entre las fuerzas de Mohamed Najibullah, de la
República Democrática de Afganistán, y los mujahidines glorificados por
el montaje hollywoodense del superhéroe Rambo.
Los célebres servicios de espionaje de Pakistán
(ISI, por sus siglas en inglés) lubricaron la intermediación de fondos,
armas y entrenamiento militar para los mujahidines, en los que
contribuyeron el espionaje británico MI6 y los Servicios Aéreos
Especiales de Gran Bretaña.
El espionaje paquistaní ISI entrenó a más de 100
mil (¡supersic!) mujahidines. Desde el ISI, servicio de espionaje de
Pakistán, hasta los caleidoscópicos yihadistas de Isis transcurrieron
dos generaciones de la transmogrificación cocinada por la CIA y su
alquimia de monstruos.
Los soviéticos abandonaron Afganistán, donde
sufrieron 14 mil muertos y más de 50 mil heridos, el 15 de febrero de
1989, lo cual desembocó en la caída del muro de Berlín y el colapso de
la URSS.
Nolan Kraszkiewicz y David Edger, de la Universidad de Oklahoma, evalúan la Operación Ciclón
(1979-89), que "desempeñó en forma magnífica (¡supersic!) los objetivos
de EU": drenar las finanzas y acabar con la URSS como "superpotencia".
Pero con una consecuencia "inesperada": "EU dejó el terreno y la
infraestructura para sus nuevos enemigos, los talibanes, quienes dieron
refugio seguro a Al Qaeda", lo cual desembocó en el 11-S (http://goo.gl/rjDJO2).
Ante la metástasis incoercible de los mujahidines, la entonces primera ministra de Pakistán, Benazir Bhutto, advirtió a Daddy Bush: "están creando un Frankenstein" y que, según Evan Thomas, de la revista Newsweek, era “la ruta al 11 de septiembre (http://goo.gl/qOx8Rd)”, la cual, por cierto, había previsto tres años antes nada menos que el entonces superespía Vladimir Putin (https://goo.gl/hZXXV1).
Juan Cole, uno de los máximos arabistas de EU,
contesta los alegatos de Trump: "No, Obama no fundó Isis, señor Trump:
fue el Partido Republicano", ya que el "Republicano" George W. Bush
"creó Daesh/Isis".
Cole remata: “Abu Musa al-Zarqawi, operador de
Al-Qaeda en Irak durante la segunda guerra del Golfo, fundó Isis de los
escombros de su organización mucho antes de que Obama fuera presidente (http://goo.gl/sCQbwm)”.
Cole está más atento a defender a Obama que a investigar e ir hasta las raíces del yihadismo desde la Operación Ciclón de la CIA eterna.
Obama no fundó a los yihadistas de Isis/Daesh
–genuina transmogrificación y gratificación de la dupla
Carter/Brzezinski–, pero los dejó renacer y proliferar en forma
deliberada, en coordinación con Hillary Clinton, su anterior y polémica
secretaria de Estado, desde los rescoldos de sus abuelos y padres
genealógicos: los mujahidines del binomio Afganistán/Pakistán de hace 37
años.
Carter, Reagan, los dos Bush ( Daddy y Baby),
los dos Clinton (Bill y Hillary) y Obama, productos del bipartidismo
imperante en EU (partidos Demócrata y Republicano) por igual,
mantuvieron a conveniencia la llama votiva del terrorismo islámico:
desde los mujahidines hasta sus hijos y nietos yihadistas, debido a
propósitos geoestratégicos de EU, con el fin de socavar las entrañas
musulmanas de las tres superpotencias euroasiáticas: ayer la URSS, hoy
Rusia, al unísono de los dos rivales geoeconómicos de Washington: China e
India.
Treinta y siete años después de la eclosión de los mujahidines, The New York Times admite que “la CIA apoya a los rebeldes sirios en la guerra de encargo de EU (http://goo.gl/m2to2l)”: ¡hijos y nietos yihadistas posmodernos!
Lo destacable es que Obama se jacta de que los yihadistas “serán derrotados inevitablemente, pero conservarán sus redes (https://goo.gl/Mto0o4)”.
¿No se pueden, acaso, desmantelar las "redes" yihadistas?
¿Significa que EU mantendrá la incubación del
terrorismo islámico por tiempo indefinido como espada de Damocles contra
las entrañas mahometanas del RIC (Rusia, India y China) conforme
convenga a sus intereses geoestratégicos en Eurasia?
El inexorable tiempo concedió la razón histórica a
la ex premier Benazir Bhutto, también asesinada e hija del ejecutado
primer Zulfikar Alí, sobre el "Frankenstein" que creó la CIA.
Tal "Frankenstein" epitomiza un programa estructurado desde Carter en 1979 mediante la Operación Ciclón,
pasando secuencialmente por Reagan/los Clinton/los Bush, hasta ahora
con Obama después de 37 años y que no ha variado en su esencia
geoestratégica: descarrilar a Rusia –incluyendo las entrañas islámicas
de China e India, dependiendo de cómo se comporten frente a los
intereses geoeconómicos y geofinancieros de EU– con los yihadistas de
Isis, como ayer lo hicieron sus abuelos y padres mujahidines de ISI con
la URSS.
Twitter: @AlfredoJalifeR_
Facebook: AlfredoJalife
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